16 de agosto de 2006

Una tarde cualquiera

Al salir a la calle, abandonar momentáneamente el cubo de cemento que habito, siento regocijo por una sensación muy primordial (primitiva, primaria, primigenia) en mi cuerpo primate. Era la caricia del viento fuerte y furioso que anuncia una tormenta. Era el espanto domesticado de escuchar un trueno cerca y a lo lejos al mismo tiempo, el cielo ruge y yo debajo de él, indefenso pero invencible. Es la respiración del cielo tocando la tierra, es la voz del cielo susurrando, es un roce planetario, una caricia en la piel de mi planeta. Y mi pelo se movía, mi piel se erizó. Esa cósmica caricia me tocó. En la mitología azteca, Ehécatl es dios del viento y una de las formas de Quetzalcóatl. Su aliento mueve el sol y hace a un lado a la lluvia. Se enamoró de una muchacha humana llamada Mayahuel, y le dio a la humanidad la habilidad de amar para que ella pudiera regresarle su pasión. Diosa Mayahuel. Imagen del Códice Borbónico. Dice el mito, que Mayahuel era una joven hermosa, que vivía en el cielo con su terrible abuela, una tzintzimitl (estrellas que diariamente tratan de impedir que el sol nazca). La bella joven huye con Quetzalcóatl [38 B] para amarse en un frondoso árbol convertidos en ramas; la abuela los descubre y envía a sus compañeras tzitzimime a matarlos. Quetzalcóatl se salva, pero Mayahuel muere carcomida por las estrellas. Sus restos son recogidos por Quetzalcóatl y tras enterrarlos, de ellos nace la primera planta de maguey, con la cual se produce el pulque, bebida ritual y ofrenda ceremonial para los dioses.

3 comentarios:

  1. Anónimo9:53 p.m.

    Una muerte y un nacer cosmico en un atardecer de tierra azteca, no es una tarde cualquiera.

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  2. Bueno, estrictamente cualquier tarde ES una tarde cualquiera. Pero eso no le quita valor a ninguna de ellas. Una tarde es todas las tardes. "El hoy fugaz es tenue y es eterno. Otro cielo no esperes, ni otro infierno" (JLB)

    Anónimo, no te duelas. Por eso de la aparente destrucción, de la aparente catástrofe nació el pulque. Salud!

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